
Síntesis de lo invertido. Es por ello por lo que mis mejillas se hunden. He aprendido a no necesitar tragar y comer, pues es suficiente tragar lágrimas reprimidas y comerse las palabras para luego meterse los dedos y vomitarlas.
El corazón descompuesto sigue silencioso, no quiere interrumpirme el silencio y yo no quiero mirarlo por miedo a descomponerme yo también. Soy y no me siento copulativo, no me siento verbo. Por no sentirme, no me siento ni vivo. ¿Qué es eso que decían los padres al amenazar? Ah! Sí...”¡andate con ojo!” Yo sí que quisiera vaciar las cuencas y andar a ciegas, para así tener una excusa para no ver lo que piso y permitirme el lujo de caer; o quizás para equivocarme de salida y acabar por perderme.
Es fácil dejarse arrastrar por mareas que no descansan...y yo soy demasiado perezoso como para intentar escapar.
genial! toque pesimista, pero muy real. mola! enhorabuena, me encanta ^^
ResponderEliminarbesotes de chocolateeee